Fotos tomadas por Manolo, vecino de la colonia en 1992.
Desde la construcción de la colonia en 1928 hasta finales de la década de los 60, las calles y callejones eran de tierra apisonada, con unas aceras estrechas alrededor de las fachadas de los edificios, para entrar a los portales. Fueron años sin casi vehículos a motor, salvo algún carromato de tres ruedas, en los sesenta comienza la circulación de algún coche.
En los setenta se colocan adoquines (foto dcha.) y en los ochenta se asfaltan las calles centrales de la colonia que conforman una “y” griega y son las más anchas (foto izq.). En los noventa se aprecia todavía el estado de parcheado, aunque el flujo de tráfico y el volumen de aparcamiento de vehículos ha aumentado de forma extraordinaria.
Maribel Gómez Sanjuán.